Carmen Labrador Muñoz
UN OTOÑO EN LA ROMAÑA… en el taller de MARTHA
Martha Pachón Rodríguez, MPR Studio (Faenza, Italia)
El lugar
Faenza es una pequeña ciudad del norte de Italia, en la región de Emilia Romaña. Conocida internacionalmente por su cerámica, en la Edad Media su producción fue tan importante que el nombre de Faenza se utiliza muchas veces como sinónimo de mayólica.
Es una ciudad acogedora, hermosa y cuidada. Su belleza es serena, como el paisaje que la rodea. Su actividad no es bulliciosa pero si animada, y es fácil encontrar actividades que resultan atractivas, como mercados al aire libre, espectáculos, ferias, muestras, y exposiciones…
Para el estudiante del arte y de la cerámica, la ciudad ofrece grandes ventajas:
– Su ubicación, cercana a importantes centros culturales y artísticos como Bolonia, Florencia, Ravena, Ferrara o Milán, y a otros menos conocidos pero tan bellos e interesantes como Cesena, Dozza o Pomposa. El desplazamiento es fácil y económico gracias a la red ferroviaria que funciona estupendamente. Cuidado con el síndrome de Sthendal ¡es real!
– La presencia de numerosos talleres o “bottega” dedicados a la creación y venta de cerámica. Es muy interesante visitarlos y observar los distintos enfoques, tanto en la labor creativa como en la empresarial.
– El MIC, Museo Internacional de cerámica, donde se puede ver obras de cerámica italiana desde la Edad Media hasta el siglo XVIII, del antiguo Próximo Oriente, del período helenístico, cerámica precolombina, islámica. Cuenta también con una parte dedicada a la cerámica moderna y contemporánea. Es una visita ineludible a la que dediqué varias tardes.
– El FAC (Faenza Art Ceramic Center), institución privada que organiza cursos, residencias para artistas… Pude visitar sus instalaciones y conocer a algunos de los artistas residentes, como Nataly Doyen o Martín McWilliam que en ese momento impartía uno de los cursos, asistir al curso que impartió Martha Pachón y tomar contacto con los participantes, venidos de distintos lugares de Italia y otros países.
Experiencia enriquecedora que debo agradecer a Martha, que aparte de acogerme en su taller ha actuado siempre como perfecta cicerone, mostrándome lugares y presentándome personas que fueran de mi interés.
Martha ha sido una profesora dedicada y entregada, delicada y concienzuda. Se ha preocupado de mostrarme su faceta artística, ha tratado de inculcarme algo de su espíritu perfeccionista, amante del detalle, me ha instruido sobre distintas técnicas, también se ha ocupado de enseñarme la organización del taller, la importancia del enfoque empresarial, pero sobre todo, me ha mostrado una actitud personal de esfuerzo incansable y compromiso admirable con su proyecto.
El taller
Martha Pachón trabaja la porcelana, una rareza en el panorama creativo de Faenza.
En su taller-estudio he podido desarrollar:
- Técnicas artísticas como el Nerikomi; distintas formas de creación de piezas en porcelana sin usar molde; realizar el proceso completo de fabricación de piezas, desde la preparación de los materiales (porcelana liquida o sólida), coloración de las pastas, colado de distintas piezas en moldes de escayola, distintos tipos de decoración, esmaltado, colocación de sellos…
- Mantenimiento y preparación de los materiales.
- Organización del taller.
- Calculo de costes y productividad
- Planificación y organización de eventos.
- Promoción y búsqueda de clientes.
Creo que el trabajo en el taller ha sido muy interesante y provechoso. He de agradecer la confianza y autonomía que Martha me ha dado en muchos de los procesos pues esto ha reforzado mi confianza, así como su actitud abierta a cualquier sugerencia para probar y experimentar, incentivando la creación y el trabajo conjunto. Todo ello me lleva a decir que ha sido un placer trabajar con Martha Pachón, sin olvidarme de su ayudante, la imprescindible y querida Giovanna.
Conclusión
Sin duda la experiencia ha sido muy positiva. Aparte del aprendizaje técnico, se produce otro tipo de enriquecimiento cultural y personal, el que te da conocer nuevos lugares, visitar centros históricos y artísticos que siempre he admirado, aprender una nueva lengua, relacionarme con gente diversa, en definitiva, el que otorga salir de tu zona de confort y desenvolverte en un medio que no es el habitual.